Aprovechando que últimamente tengo mucho tiempo libre, me da por leer. Y, para mi sorpresa, me he dado cuenta de un detalle bastante absurdo.
¿Os habéis dado cuenta de la gran cantidad de blogs que hay acerca de esto del correr? ¿y de que casi nunca son los primeros de la clase los que lo hacen? De hecho, y salvando las distancias, suelen ser gentes de mitad de pelotón. Y, curiosamente, a medida que van bajando ritmos, más chiste me hacen sus blogs.
Que sí, que no dudo que hay gente a la que le interesa conocer al dedillo los ritmos y los entrenos que se gastan estas fieras, pero... Me resulta un poco aburrido, qué queréis que os diga. Que si hoy he hecho un fartlek, que si series de, que si he participado en tal carrera, para quedar en tal puesto a un ritmo de tanto...Bufff, que pereza. (salvando honrosas excepciones, que las hay)
Sin embargo, según van bajando los ritmos (y, aún así inalcanzables para un menda), se va incrementando el placer que me producen sus entradas. Y es que a medida que los tiempos dejan de tener protagonismo, tocan aspectos que, si bien son tangenciales, son los que dan vidilla a este tipo de lecturas, por lo menos para mí. Anécdotas, chascarrillos, historias bien hiladas de alguna carrera...
Porque ojo, no son los primeros, pero mínimo, mínimo, se han corrido 20 maratones y 5 o seis ultras, y llevan 30 años en este mundillo. Algo saben, ¿no?.
Y encima se conocen. Metete en cualquier blog, y, a base de enlaces, llegas a todos, como la ardilla que se recorría España de árbol en árbol. Y, como ejemplo, mirad a la derecha de este, hay unos cuantos.
Nada, a ver si un día me encuentro linkado... Aunque lo veo complicado, con el nivel de popularidad de este mi blog. Será que soy pro.
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